La Asociación de la Industria Europea del Autocuidado (AESGP) ha recogido diez recomendaciones para construir una salud pública en la Unión Europea más fuerte. Este lo han elaborado 33 organizaciones de la comunidad sanitaria aprovechando que la salud es ahora un tema prioritario en las agendas políticas. Entre las recomendaciones, destaca la importancia de la innovación y la investigación, así como la imperiosa necesidad de la transformación en salud digital.
Compartir los datos de los pacientes
La medición y recolección de datos de salud de los pacientes y su compartición entre los países europeos, es útil a la hora de reforzar los sistemas sanitarios europeos y poder replicar historias de éxito de otros países. Además, abriría la posibilidad de ser capaces de monitorizar las enfermedades en tiempo real y hacer evaluaciones de riesgo de amenazas en salud transfronterizas.
Contar con un foro de innovación
Crear un foro para mejorar el acceso a la salud desde el punto de vista de la innovación. Esto sería una herramienta muy útil para comentar las ventajas y los inconvenientes de acceder a la innovación, desde la enfermedad, su prevención y las terapias hasta la materia económica y regulatoria.
Facilitar las asociaciones de múltiples interesados con las regiones y ciudades
A través del programa EU4Health se busca apoyar la transferencia de conocimientos y ampliar las redes de áreas de enfermedad entre los países de la UE. Asimismo, proponen que este plan se utilice para fortalecer la prevención de enfermedades, la atención médica y la evaluación de sistemas.
Una coordinación sólida de la Comisión Europea
Usar herramientas para garantizar una coordinación sólida desde la Comisión Europea para conseguir la equidad sanitaria y el liderazgo en salud. Algunas de las propuestas de las organizaciones participantes radican en reforzar las competencias de las agencias de la UE, como la Agencia Europea del Medicamento (EMA) o el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC).
Europa como Health Hub
Construir un centro de investigación potente en Europa es una de las estrategias para invertir en un ecosistema de investigación a largo plazo que englobe las redes interdisciplinarias, las iniciativas fronterizas, el papel de las PYME y la educación médica, entre otras. Los autores argumentan que, en materia de investigación, es necesario contar con “infraestructuras de laboratorio e industria y mano de obra cualificada”.
Coordinar los esfuerzos de investigación en toda Europa
De esta manera, se puede abordar conjuntamente los nuevos y complejos problemas de salud con un mejor resultado, ya que se está uniendo el entramado sanitario de Europa hacia un mismo objetivo.
Tener una mayor flexibilidad en el marco regulatorio
En situaciones sanitarias como la pandemia, es necesario poder tomar decisiones de una manera rápida. Por eso es importante asegurar una mayor flexibilidad en el marco regulatorio y en los mecanismos financieros para poder apoyar la investigación traslacional y garantizar herramientas que mejoren la vida de los pacientes ante futuras amenazas para la salud y crear un ecosistema de investigación robusto.
Apostar por la investigación
La investigación constituye una de las prioridades del momento, por lo que se aconseja acelerar la creación de un espacio europeo de datos sanitarios destinado a la investigación, la innovación y la colaboración. Uno de los programas en marcha en este sentido y al que hacen referencia es el ‘EU4Health, Recovery and Resilience’, mecanismo integrado en el semestre europeo.
La AESGP recoge las recomendaciones de 33 organizaciones sanitarias
Invertir en salud digital
Ahora más que nunca se ha visto la necesidad de asegurar la interoperabilidad de la salud a través de los servicios de salud digital como los expedientes médicos electrónicos, la conexión de los servicios personales y las herramientas de colaboración. Pero, para el éxito de la digitalización, deben ser interoperables y se debe “adaptar la legislación para garantizar un acceso seguro a los datos electrónicos de salud” según afirman los autores.
Regular el marco ético de la Inteligencia Artificial
En cuanto a la Inteligencia Artificial es necesario establecer un marco ético para que sea, a la vez, flexible, específica para el sector de la salud y no comprometa la confianza pública.
Aceptar y salir
