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La dieta en personas con hipercolesterolemia familiar, ¿un reto? Entrevista a Nuria Alonso
La hipercolesterolemia familiar está asociada a un aumento del riesgo de desarrollar una enfermedad cardiovascular precozmente. Para prevenir la ateroesclerosis y, por tanto, la aparición de estas enfermedades
cardiovasculares, además de reducir el colesterol y los triglicéridos a través del efectivo arsenal terapéutico existente, los profesionales indican la necesidad de seguir un abordaje no farmacológico. Este incluye la
actividad física, un estilo de vida saludable y una dieta adecuada. Precisamente esta última cuestión, incorporar una dieta para personas con hipercolesterolemia familiar, no suele ser una tarea sencilla.
“En la consulta, los médicos le hacemos al paciente unas recomendaciones de dieta y les solemos dar una hoja escrita con estas recomendaciones. Haciendo las cosas así no se ayudaba a adquirir hábitos alimenticios
adecuados. Uno aprende haciendo las cosas”, explica la doctora Nuria Alonso Pedrol en una entrevista en REDcast.
La doctora Alonso Pedrol es médico del servicio de endocrinología y nutrición del hospital German Trias I Puyol de Badalona. Ante esta situación, ha puesto en marcha un innovador proyecto en colaboración con la
Fundación Alicia que consiste en el desarrollo de talleres de dieta no solo para el día a día, sino también para celebrar ocasiones especiales. “Una de las novedades de estos talleres es que son presenciales. Se realizan
en la cocina de nuestro hospital. Pero hemos ido más allá. En el concepto de esta iniciativa hemos incluido la educación global, es decir, a todos los miembros de la familia”, indica la doctora Alonso.
“Se sabe que cuanto antes de adquieran los hábitos higiénico-dietéticos, más fácil es que se mantengan a lo largo de la vida"
Dietas para personas con hipercolesterolemia familiar, mejor en familia
Sabemos que, en función de la dieta basal y de la disminución en el aporte de grasa saturada, se pueden obtener reducciones en el c-LDL (colesterol malo) de un 10 a un 20% en personas con hipercolesterolemia familiar y,
por consiguiente, un descenso en el riesgo de aparición de enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, este dato no ayuda a que los pacientes adquieran hábitos de alimentación adecuados.
De ahí que la doctora Nuria Alonso y la Fundación Alicia pensaran en involucrar a la familia: “Se sabe que
cuanto antes de adquieran los hábitos higiénico-dietéticos, más fácil es que se mantengan a lo largo de la vida. Es decir, a nivel de infancia es más fácil modificar los hábitos que ya en la edad adulta”. Otro de
los motivos de plantear estos talleres en familia es que, “como todos comen juntos, los unos por los otros se motivan mutuamente y se animan a realizar platos más cardiosaludables y que no alteren el perfil lipídico”.
Este proyecto no acaba aquí. Con posterioridad a la realización del taller, los participantes tendrán a su disposición a una profesional en nutrición para solventar las dudas que queden latentes. “Está asignada una
dietista que hará el seguimiento y citará a los pacientes. Tamibén resolverá dudas y comprobará si la modificación en estos hábitos repercute en algunos marcadores nutricionales”, explica la doctora.
Aceptar y salir
